01 de septiembre del 2020 | La comida nos conecta, y es parte importante de la vida de todo/a hondureño/a. Para saludar o cuando estas en familia es común preguntar “¿Qué vamos a comer hoy? » o “¿Qué comiste hoy?».
Sin embargo, hoy en día en países como Honduras existe un 25.90% de prevalencia de anemia en niñas y niños menores de 5 años, 58 % de los alimentos son carbohidratos para niñas, niños y adolescentes y un 20.2% de adultos, jóvenes y niños y niñas padecen de sobre peso u obesidad.
Los cambios en la dieta y el estilo de vida en los últimos años han afectado la cultura alimentaria tradicional y la salud de millones de personas. La «comida rápida» y los “snacks” poco saludables con alto contenido de azúcar, sal y grasa son muy comunes a pesar de no ofrecer nutrientes.
Por ello, en el mes deseptiembre, la organización internacional Rikolto, con fondos de la Unión Europea, a través de la Unidad Técnica de Seguridad Alimentaria y Nutricional (UTSAN) por medio del proyecto Eurosan Occidente en el marco de la subvención «Tecnología y diálogo de saberes para fomentar la seguridad alimentaria y nutricional en Honduras» presentaron el recetario arcoíris: ingredientes de la hidroponía familiar.
“El nombre arcoíris hace alusión a la variedad de colores y nutrientes que tienen las verduras y frutas, y otros alimentos, y una alimentación saludable está muy conectada con este balance en la ingesta de alimentos” dice Nataly Pinto, coordinadora del programa SAS o Sistemas Alimentarios Sostenibles y Resilientes de Rikolto.
Elsa López, nutricionista y máster en salud pública, autora del recetario, explica que la población rural enfrenta limitantes importantes para lograr una alimentación sana y balanceada y esto se confirma con un reporte de la UTSAN que revela que al menos 18% de la población padece de inseguridad alimentaria agua severa, que además puede verse agravada por la pandemia.
Podría enumerar cuatro limitantes, la falta de acceso a los alimentos debido a los altos niveles de pobreza, segundo su alto costo; tercero el limitado acceso a una educación nutricional y alimentaria que les permita conocer las sustancias que aportan los alimentos y benefician la salud, esto incluso entre las familias que se dedican a la agricultora que cuentan con los medios de producción y acceso a hortalizas y frutas. El cuarto es la publicidad masiva que proviene de las cadenas de comidas rápidas que no ofrecen opciones saludables.
Un mundo mejor comienza por los alimentos que ponemos en nuestra mesa
A través del proyecto que inició en el año 2019 se pretende fomentar la seguridad alimentaria y nutricional de 500 familias agricultoras socias de las empresas asociativas que conforman el Consorcio Agrocomercial de Honduras, mediante:
- La dotación de tecnología para la producción de vegetales en hidroponía
- Intercambio de conocimientos y formación de capacidades a las familias productoras, con énfasis en hombres y mujeres jóvenes, mediante escuelas de campo (ECAs) en las fincas donde se instalarán los sistemas
- Orientar a madres y jóvenes en las zonas urbanas y rurales sobre cómo deben alimentar sus familias e incorporar gradualmente las hortalizas y frutas en sus hábitos alimentarios.
A partir de este objetivo es que se elaboró el recetario guía, la preparación de los alimentos se validó con madres de familia de las empresas socias del Consorcio a pesar de las limitaciones debido al Covid, y se continuará socializando como parte de la subvención, a través de medios virtuales. Además, son recetas elaboradas utilizando los 6 cultivos que las familias están cultivando: acelga, pepino, lechuga escarola, chile dulce, espinaca y tomate.
“Al aprender de hidroponía, cultivamos sin depender del clima, el Covid fue malo, pero el cambio climático es nuestro peor enemigo. Con la hidroponía, no utilizamos químicos perjudiciales para la salud de los consumidores, y ¡la nuestra!, pues cultivando a “cielo abierto” algunas veces nos exponemos a los pesticidas cuando el aire los levanta” dice Rumualda Martínez, del Pacayal, Chinacla, Marcala, una de las protagonistas e integrante del grupo de mujeres beneficiado de los 18 invernaderos que se están piloteando en 5 departamentos del país.
Elsa, espera que esta herramienta pueda orientar a las familias sobre el uso de los alimentos que tienen a su alcance y poder comunicar las bondades de los alimentos, para que los aprovechen al máximo.
¿Aceptas el desafio? #RecetaArcoirisChallenge
La crisis del COVID-19 acentuó varios problemas alimentarios. El acceso a alimentos frescos y sanos se convirtió en un reto mayor durante las medidas de no movilización y distanciamiento social, y la población recurrió y aún recurre a alimentos «rápidos y convenientes».
Una forma de frenar esta marea es reconectar a las familias y a los jóvenes con la comida. Por eso, en el marco de la subvención “Tecnología y diálogo de saberes para fomentar la seguridad alimentaria y nutricional en Honduras” financiada por la Unión Europea, a través de la UTSAN, por medio del proyecto Eurosan Occidentey ejecutada por Rikolto, te invitamos a participar en el #RecetaArcoirisChallenge.
¿Por qué? Porque un mundo mejor comienza con nuestra comida. Empieza contigo, en la mesa, con las recetas del Recetario arcoíris.
Participa en 3 pasos
1. Escoge tu receta favorita descargando tu copia del recetario o descubre más recetas en el Instagram de @rikoltolatam.
2. Publica tu receta con fotos, videos en tus historias o feed en Instagram o Facebook. Utiliza los hashtags #recetaarcorischallenge #hidroponíafamiliar #consumelocal. ¡Comparte en tus redes!
